
Casi la mitad de los juzgados de España (1.695 de 3.894) sufren una sobrecarga de trabajo superior al 150%, según el último informe del Servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judical (CGPJ). De éstos, en 864 juzgados el porcentaje de asuntos pendientes de resolución, lo que refleja el atasco y la saturación que sufren estos órganos, es superior a la media. Los juzgados de la Comunidad Valenciana, Andalucia, Castilla-La Mancha y Madrid son los que tienen el mayor porcentaje de sobrecarga de trabajo. Por órganos, los juzgados de lo social, los de primera instancia y los mercantiles, son los que más atascos sufren.
“Es un problema grave y complejo”, señala la juez Mar Cabrejas, miembro de la comisión permanente del CGPJ. “Existe una descompensación en la distribución de cargas de trabajo: hay un número significativo de juzgados que presenta cargas inferiores al 100% y por otro lado la crísis económica ha saturado especialmente juzgados sociales, mercantiles y civiles. La no creación de plazas en los últimos cuatro años ha complicado el panorama”.
El juzgado con más sobrecarga de trabajo en España (483%) es el mercantil número 2 de Sevilla, cuyo titular es Miguel Ángel Navarro. Si la carga aprobada para cada juzgado de lo Mercantil es de entre 333 y 399 asuntos, al juez Navarro le llegaron el año pasado 1.769.
El trabajo de los jueces de lo Mercantil se ha disparado con la crisis debido, sobre todo, a los concursos de acreedores. En lo que va de año, al despacho del juez Navarro han llegado 783 demandas concursales. Pero aún son más las demandas de asuntos mercantiles, 1.241 desde enero, entre las que destacan los procedimientos por impugnación de condiciones generales de los contratos, en especial las cláusulas suelo de las hipotecas. “Las condiciones abusivas de muchos contratos son una realidad que antes ni se denunciaban. Ahora hay abogados que se están especializando en estos asuntos y nos llegan en aluvión”, señala Navarro, que cuenta con la ayuda de otro juez en comisión de servicio.