La acusación parte de los propios letrados: los casos de violencia de género han sido “los grandes olvidados este verano” por el Ministerio de Justicia y los Tribunales Superiores de Justicia (TSJ). Se comprometieron a reforzar los equipos destinados a este tipo de casos pero los jueces de guardia no han dado abasto para atender todos los incidentes.
Estamos ante uno de los veranos más ‘negro’ en cuanto a violencia machista de los últimos años. Al menos 25 mujeres y ocho niños han muerto ya este año en España a manos de su pareja o ex pareja.
Sólo entre el 30 de junio y el 12 de agosto fallecieron por muerte violenta 6 niños y otras 6 mujeres a manos de sus padres y familiares, en las seis semanas más trágicas del periodo estival.
Esto ha coincidido con una flagrante falta de personal en los juzgados especializados en este tipo de delitos. Según explica a El Confidencial Digital Sonia Reina, abogada especializada en casos de violencia de género en Cataluña, se han vivido casos verdaderamente dramáticos.
Precisamente en verano, cuando el repunte de este tipo de delitos en algunas localidades turísticas es una evidencia, apunta.
Sin jueces de sustitución
Las vacaciones de los jueces titulares y la escasa contratación de suplentes ha provocado un alto grado de desatención en los casos de este tipo, explica la abogada.
Ahora
sólo se contrata a magistrados suplentes en casos de sustitución entre
jueces titulares. Ya no se cubren ni bajas por maternidad, ni por
enfermedad, ni vacaciones de los titulares. Esto ha hecho que los jueces de guardia hayan tenido que asumir una mayor carga de trabajo.
El problema de la especialización
Aunque la legislación establece que todas las denuncias deberán ser tramitadas por el juez de guardia, éste no siempre está especializado en temas de esta índole o no dispone del tiempo necesario para atenderlos como debería.
Durante
todo el año, sólo cuatro juzgados de violencia de género están de
guardia permanente en todo el territorio nacional: en Valencia, Sevilla,
Barcelona y Madrid. En el resto de España los tribunales sólo funcionan
por las mañanas y en horario laboral.
Algunos jueces se ven obligados a atender hasta tres sedes a la vez,
apunta la abogada. La especialización en la tramitación de las causas
es casi inexistente. Las desigualdades en este punto son enormes, apunta
la abogada.
Además, según explica Susana Gisbert, fiscal de violencia de género de Valencia, las tramitaciones que un juez de guardia debe llevar a cabo en estos casos son enormes.
Cada guardia suelen atender alrededor de 10 casos,
sin contar los expedientes en curso. Estos casos van desde maltrato
físico o verbal, amenazas a través de dispositivos tecnológicos, hasta
órdenes de alejamiento o casos de violación.
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