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viernes, 17 de mayo de 2013

La empresa que revisó la Ciudad de la Justicia fijó más losas por riesgo de desprendimiento

La caída de un fragmento de la fachada de la Ciudad de la Justicia, que se saldó con tres heridos, ha reabierto el debate sobre las deficientes condiciones que presentan buena parte de las sedes judiciales en la Comunitat.

La empresa que revisó el exterior del edificio al día siguiente del suceso tuvo que fijar varias losas por riesgo de nuevos desprendimientos, según confirmaron fuentes de la propia Conselleria de Justicia.

No obstante, desde el departamento autonómico desvincularon esta actuación de una falta de mantenimiento de las instalaciones. De hecho, recuerdan que la fachada ya se inspeccionó hace ahora dos años justo a raíz de otro desprendimiento que, por suerte, no tuvo consecuencias personales.

La Ciudad de la Justicia se inauguró en 2003 y comenzó a funcionar a pleno rendimiento al año siguiente. Desde entonces se han registrado tres caídas de losas procedentes de la fachada.
Las tres víctimas del último desprendimiento resultaron heridas leves. Una mujer que había acudido desde Alicante a un juicio fue la peor parada. El golpe de uno de los fragmentos le produjo una brecha en la cabeza. El vocal del Poder Judicial Pío Aguirre, que había acudido a un curso que se celebraba en Valencia, también sufrió un fuerte golpe en el hombro. Por último, un vendedor de lotería de la Cruz Roja se quejaba de molestias en el codo.

Otra de las instalaciones en el punto de mira es el Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El desplome de parte del techo justo a la entrada de unos lavabos despertó la preocupación en los responsables de Justicia.

El problema se solucionó definitivamente el pasado viernes, justo un mes después de los hechos. No sólo se ha vuelto a colocar la escayola en el techo sino que se ha sustituido la tubería por la que se filtraba agua, humedad que fue finalmente la causa del hundimiento.

Las obras obligaron a trasladar a una traductora del TSJ a la Ciudad de la Justicia. Además, otros dos magistrados que tenían sus despachos en la tercera planta del edificio serán ubicados en otras dependencias dentro del mismo Palacio de Justicia. Fuentes de la conselleria confirmaron que esa planta quedará desierta.

El sindicato CSI.F solicitó recientemente a la Dirección General de Justicia que elaborara un estudio sobre el estado de conservación del edificio. En especial, pretendían que los técnicos incidieran sobre el mantenimiento de los techos y la estructura.

La falta de recursos económicos por parte de la Generalitat obligó en su día a paralizar la construcción de una docena de sedes judiciales en la región. Entre estos proyectos, estaba prevista la rehabilitación del Tribunal Superior de Justicia, un edificio en el que apenas se ha intervenido desde que en su día se ubicaran allí las dependencias judiciales.

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