La improvisación en
la implantación de los SCAG ha creado problemas en la prestación del servicio a
la ciudadanía a la vez que una tremenda inseguridad en las funciones que
realizan las y los trabajadores.
Desde que la actual Administración
comunicó su firme intención de implantar un nuevo modelo de oficina judicial,
estas organizaciones sindicales intentamos negociar las mejores condiciones
laborales para el personal de Justicia, ya que posicionarse en contra sólo
significaba la aplicación estricta de la LOPJ pura y dura, y tampoco se aportaba ninguna
solución a la delicada situación que atraviesa la justicia valenciana.
Los problemas han venido cuando se
ha pasado de la teoría a la práctica. Las prisas por la implantación de esta
primera fase, sin ningún tipo de previsión y sin formación suficiente tanto por
parte de las y los Letrados directores como de las y los jefes de sección han
herido gravemente la sensibilidad de las y los trabajadores y han producido una
situación de caos organizativo en el servicio que se debe prestar.
Ya denunciamos la falta de
transparencia en el acoplamiento que precedió a la entrada en funcionamiento de
los SCAG en Alicante, Castellón, Elche y Valencia; los descuadres de plantillas
como consecuencia de la creación de puestos de libre designación que
prácticamente han quedado desiertos (cosa que avisamos que iba a pasar).
Y lo más grave, la intolerable
decisión de los Letrados, amparados por la Administración, de
hacer uso desde el primer momento de lo que debería ser una excepción en cuanto
al traspaso de personal entre Secciones.
Pero la falta de previsión y las
prisas sin sentido conciernen hasta lo más básico:
-
adecuación
de las instalaciones (falta de despachos para jefaturas, falta de pc’s y
espacio físico para algunos compañeros,…)
-
falta
de formación previa de las y los trabajadores que iban a realizar nuevas
tareas.
-
falta
de sellos de entrada del nuevo servicio.
Ahora hay quien dice que ya lo veía
venir en su bola de cristal, una cosa es avisar y otra ser pájaro de mal
agüero. Este caos organizativo no se ha producido en la entrada en
funcionamiento de los 31 partidos restantes. Por eso, es ahora que se producen
los problemas cuando hay que solucionarlos.
CCOO,
Intersindical y UGT exigimos la paralización de la implantación de la NOJ para que se analicen y se
solucionen todos los errores y problemas causados. En ningún caso vamos a ser
cómplices de la irresponsabilidad de la Administración.
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