El Consell privatizará la gestión del Palacio de Justicia de Alzira para poder construirlo

La empresa constructora gestionará la sede judicial mediante un contrato de colaboración público-privado.

El Consell aún no tiene muy claro cuándo podrá iniciar la construcción del tantas veces prometido Palacio de Justicia de Alzira, aunque ya ha decidido la fórmula que utilizará para poder afrontar una inversión que en el año 2007 se estimó en más de 12 millones de euros sin que le compute como deuda, que pasa por recurrir a un contrato de colaboración público-privado de forma que cederá a una empresa tanto la construcción como la gestión integral del edificio, según el anuncio realizado ayer por la consellera de Justicia, Paula Sánchez de León, que defendió que prevé aplicar este nuevo modelo de gestión previsto en la Ley de Contratos del Estado -se otorga una concesión con un precio anual y durante un período lo suficientemente amplio para que el adjudicatario pueda amortizar la inversión inicial- para gestionar las instalaciones pendientes del Plan de Infraestructuras Judiciales. Sánchez de León comentó que el proyecto de la nueva sede judicial de Alzira está a punto de superar toda la tramitación administrativa y se mostró optimista en poder licitar las obras a lo largo del próximo año, pero sin concretar ninguna fecha.
La consellera explicó que la actual coyuntura económica ha "ralentizado y obligado a revisar la puesta en marcha de algunos proyectos" y señaló que, desde hace un par de años, su departamento viene estudiando nuevas fórmulas de gestión para poder acometer las sedes judiciales pendientes pendientes "de forma que esa inversión no compute como deuda".
Sánchez de León detalló que frente al sistema alemán que se venía aplicando -el Consell empieza a pagar una vez recibe el edificio-, ahora se utilizará el contrato de colaboración público-privado que, según dijo, al propiciar la competencia entre las empresas contribuirá a "racionalizar los costes" y evitará el problema que en la actualidad representa la "compleja gestión" de las sedes judiciales. La consellera señaló que salvo algunos servicios muy vinculados a la Administración de Justicia, que no se pueden ceder, la gestión del edificio abarca desde la limpieza hasta el mantenimiento informático y auguró un ahorro próximo al 30%. Paula Sánchez de León abogó por "adaptar el modelo inversor a nuevas fórmulas como ésta".
Un Palacio de Justicia que reúna en un edificios los juzgados de Alzira, dispersos en tres sedes, es una antigua reivindicación que se remonta a los años noventa.
Fuente: www.levante-emv.com